Si hay un sueño que tienen en común la gran mayoría de los niños, es poder experimentar la sensación de volar. Anhelo que pudieron cumplir el pasado vienes, a su corta edad, un grupo de 20 menores con cáncer que son tratados en los hospitales San Borja Arriarán y Sótero del Río.
A las 11 de la mañana llegaron los menores hasta el aeródromo de Vitacura, donde los esperaban cuatro aviones dispuestos por el Club, para hacer realidad esta gran aventura.
Tras un desayuno, donde se les contó acerca del mundo de la aviación y la historia del aeródromo, los niños se subieron a las aeronaves para emprender un vuelo demostrativo de 25 minutos por el sector oriente de Santiago.
Desde arriba, los menores pudieron apreciar el cerro San Cristóbal, el edificio Costanera Center, el cerro Manquehue y la imponente cordillera de Los Andes de fondo. Una experiencia inolvidable que todos querían volver a repetir una vez en tierra.
Arturo Diez, administrador del aeródromo de Vitacura y representa del Club de Planeadores, indicó que “esta actividad forma parte del programa “Cóndores del Manquehue, que consiste en sacar a volar a menores en riesgo social o con algún grado de vulnerabilidad, y lo que buscamos es ofrecerle una mañana cargada de alegría y emoción, y que les quede como recuerdo para toda la vida”.
En la actividad participó la Subsecretaría de Redes Asistenciales, entidad que fue representada por la doctora Adriana Tapia, quien acompañó a estos niños a cumplir su sueño de volar en uno de los aviones.
Una vez finalizados los vuelos, los menores compartieron sus respectivas experiencias